viernes, 29 de junio de 2018

Una batalla ganada en contra del ajuste:Nación y Provincia dieron marcha atrás con el recorte en el Hospital El Cruce, de Florencio Varela


En la convocatoria hubo muchos ex pacientes que elogiaron la atención en el hospital.El hospital, un centro de excelencia, iba a perder casi el 43 por ciento del presupuesto. A la mañana hubo un multitudinario abrazo al que se sumaron vecinos y pacientes. Por la tarde, los ministros de Salud de Nación y Provincia anunciaron que no habrá poda.
En la convocatoria hubo muchos ex pacientes que elogiaron la atención en el hospital. 
Imagen: Bernardino Avila
“Esto es impresionante. Somos muchísimos”. Ese comentario, pronunciado por un médico emocionado, fue repetido por varios durante el abrazo que profesionales de la salud, pacientes y vecinos de Florencio Varela dieron ayer a la mañana al Hospital El Cruce, en rechazo al ajuste presupuestario del 42,9 por ciento anunciado por las autoridades. A la tarde, según confirmó el presidente de la Asociación de Profesionales Jerónimo Chaparro, una comisión de trabajadores se reunió con los ministros de Salud de Nación, Adolfo Rubinstein, y la provincia, Andrés Scarsi, quienes asumieron el compromiso de garantizar el pleno presupuesto y anunciaron, además, el recambio de las autoridades del hospital. “En la historia de la salud pública argentina no hay una victoria de estas dimensiones, lograda en tan poco tiempo”, dijo al respecto el enfermero Damián Zamorano.
Aunque confirmaron la marcha atrás con el achique en el hospital, Chaparro sostuvo que los ministros dejaron para más adelante la discusión sobre las otras demandas (carrera hospitalaria y pauta salarial).
A la mañana, la entrada del hospital de alta complejidad en red El Cruce-Néstor Kirchner estaba llena de hombres y mujeres de guardapolvos blancos, rojos y azules. Además de los médicos y enfermeros, empezaron a llegar desde temprano vecinos y pacientes que llevaron sus carteles y banderas de Argentina para solidarizarse con la institución que los viene atendiendo desde hace más de 10 años. “Yo hace 4 años que me atiendo en el hospital. Ellos me salvaron la vida. Me trasladó PAMI por una mala praxis que me realizaron en un sanatorio privado por una enfermedad oncológica. Acá me atendieron espectacularmente bien y espero que puedan seguir haciéndolo. En este hospital no somos cosas, no somos números, somos seres humanos y nos atienden con una calidad realmente impresionante que no he visto en ninguna clínica privada”, dijo Vilma, una vecina de Quilmes de 63 años.
Alrededor de las 10.30, la entrada del hospital ya estaba repleta. Los trabajadores desplegaron una bandera argentina de varios metros de ancho con la inscripción “Hospital El Cruce. Médicos Clínicos” y el rumoreo entre los vecinos se intensificó: “Soy de Florencio Varela y vengo porque es lo único bueno que tenemos acá, en el conurbano. Sería muy injusto que les recorten el presupuesto”, le dijo Cristina, de 35, a María, de 80. “Dicen que le van a sacar el 40 por ciento. ¿Cómo van a seguir adelante? Mi marido estuvo casi un año acá, por un ACV. Lo han atendido de primera. Hace unos años murió, por un paro cardíaco. Él adoraba este hospital, por eso vengo”, contó María.
Si bien abundaron las banderas argentinas, por el pedido que habían hecho los trabajadores de “no traer bombos, ni banderas políticas”, en los carteles y comentarios de los vecinos se responsabilizó a los gobiernos provincial y nacional por los ajustes. “Macri-Vidal ¡Asesinos! Desfinanciar la salud pública provoca muertes”, escribió Eduardo, un jubilado de 72 años, en el cartel que colgó de su cuello. “Vengo acá para rechazar la barbaridad que está haciendo este gobierno, que atropella a la salud pública. Atrás de esta decisión, lamentablemente, se generan muertes. Por eso puse que son asesinos en mi cartel. Este hospital es un orgullo. No solamente de Berazategui, de Varela, sino también de la Argentina”, dijo el hombre de Berazategui.
“No podemos aceptar pensar que tenemos que trabajar en función de un recorte presupuestario. Porque somos profesionales de la salud de un hospital público, y nuestro sentido de existencia tiene que ver con la comunidad. Y no podemos pensar en que tenemos que elegir entre una u otra persona. La comunidad es toda, y nosotros tenemos que darle una respuesta a toda esa comunidad”, expresó Chaparro, el presidente de la Asociación de Profesionales El Cruce, durante la conferencia de prensa que se realizó en medio de la multitud.
Carlos Tajer, jefe de Cardiología, explicó luego: “El hospital El Cruce es un proyecto único de la medicina argentina de crear un centro de alta complejidad en un contexto con grandes carencias de atención de salud. Este proyecto ha sido un éxito, un orgullo, y es parte del capital simbólico de lo que los argentinos somos capaces de hacer para mejorar nuestros problemas”. Tajer afirmó que El Cruce, además de resolver los problemas de los pacientes de la zona, “es un centro de referencia nacional. Cerca del 30 por ciento de los pacientes vienen de todos los sitios del país a recibir prestaciones que no se hacen en otros lados: trasplantes cardíacos, trasplantes hepáticos, cirugías de epilepsia, trasplantes de médula ósea y atención de alta complejidad en diferentes especialidades”.
Frente al anuncio de las autoridades sobre el recorte presupuestario, sostuvo: “Nosotros estamos defendiendo claramente el concepto de equidad en la salud pública, que una persona humilde pueda tener acceso a la mejor tecnología y a las mejores condiciones de salud. Lamentablemente, si recortamos el presupuesto del hospital y si tendemos a achicar las prestaciones, vamos a tener que decir ‘no, no hay camas, no hay elementos, no hay insumos’ y eso es algo que no queremos”.
Silvia Kochen, investigadora del Conicet y directora de Unidad Ejecutora de Estudios en Neurociencias y Sistemas Complejos (ENyS), cerró la conferencia: “Todos los que estamos aquí seguramente compartimos la misma premisa: la salud es un derecho humano. Por lo tanto, la salud no se negocia. La salud no se toca. En salud, las restricciones presupuestarias equivalen a la muerte”. Y concluyó, sobre la importancia que se da en El Cruce a la investigación: “Nosotros, como investigadores del Conicet, pero también como trabajadores de la salud, estamos orgullosos de poder trabajar acá, porque lo que nosotros investigamos inmediatamente se puede trasladar a mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes”. 
Cerrada la conferencia, los profesionales, pacientes y vecinos dieron la vuelta al hospital entonando “Olé olé, olé olá / Basta de ajuste al hospital / porque es del pueblo y nadie lo va a destrozar”. En medio de la multitud estaba Yemina, de 32 años, con su bebé de 6 meses y otros familiares. Tenían pañuelos y remeras en los que habían impreso: “Salvemos al Hospital El Cruce. #YoBancoLaSaludPública”. “Mi bebé nació con una válvula pulmonar tapada. Nació en otro hospital y al tercer día nos trasladaron acá y le hicieron un cateterismo. Así que estoy muy agradecida con el hospital y lo vengo a apoyar por ella, más que nada. Yo estuve 22 días internada acá con la bebé y es impresionante cómo te atienden. La calidad humana de los médicos, de los enfermeros. Mi hija a los 15 días se descompensó, hizo una crisis hipertensiva, estuvo al borde de la muerte, y acá le salvaron la vida. No tengo más que agradecerle al hospital y a los médicos”, dijo Yemina con su hija en brazos. 
El diputado nacional Felipe Solá acompañó el reclamo: “Si hay un lugar en donde hay que poner toda la plata es en un hospital”, destacó y sostuvo que “el Gobierno perdió la conciencia de la necesidad de la gente, de lo que sufren los que menos tienen”.
Mientras la multitud llegaba al final del abrazo, algunos médicos que se pararon sobre la pared bajita que rodea al hospital filmaban sorprendidos por la cantidad de gente y gritaban “gracias a todos, gracias por venir”. Al llegar a la entrada, sobre la avenida Calchaquí, los trabajadores posaron para la foto con la bandera argentina y cerraron con el clásico “Unidad, de los trabajadores. Y al que no le gusta, se jode, se jode”.
Informe: Azul Tejada.
Fuente:Pagina/12

jueves, 28 de junio de 2018

DOCUMENTO > Política exterior y negociaciones con la Unión Europea A contramano de la tendencia mundial


El tratado Mercosur-UE es un proyecto que condiciona la soberanía nacional a partir de la destrucción de capacidades productivas y tecnológicas en un renovado intento de sometimiento a los intereses de los países más avanzados.
La política exterior parece orientada por preconceptos que ya rigieron en los años ´90, y que a pesar de su probada incapacidad para mejorar el status internacional de nuestro país, vuelven a ser utilizados por la actual administración. Se observa una lectura de la realidad global más cercana al mundo unipolar existente hace un cuarto de siglo, que a la actual configuración múltiple de fuerzas, con áreas de enorme dinámica de crecimiento, tradicionalmente desatendidas por la diplomacia argentina, y otros espacios sumidos en problemas de estancamiento y tendencias proteccionistas, a los cuales se insiste en asociarse.
En la conducción de la política exterior parece ignorarse la existencia de dos elementos económicos centrales:
  1. La falta de resolución de la crisis financiera de 2008, que provocó una caída en la demanda global de Estados, empresas y particulares, fundamentalmente en occidente, cuya dinámica no se ha recuperado porque no se ha resuelto el problema del elevado endeudamiento general que inmoviliza la demanda.
  2. Las presiones proteccionistas y el unilateralismo que a partir de esa realidad surgen precisamente en las áreas que prioriza la administración macrista para establecer vínculos comerciales más estrechos.
Pareciera que se busca lograr una inserción comercial “a la chilena”, basada en la exportación de bienes y servicios de un conjunto de actividades con bajo valor agregado (agro, pesca, minería, hidrocarburos, madera, turismo), mientras se resignan las actividades portadoras de cambio productivo y tecnológico, y creadoras de empleo calificado, en aras del libre comercio y la integración pasiva al orden global.
Dentro de esa estrategia sesgada, se buscan aceleradamente acuerdos para el ingreso a la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) y un tratado de comercio e inversiones entre el Mercosur y la Unión Europea.
Para lograr tal acuerdo con la UE, se está utilizando el Mercosur para negociar un tratado bilateral, pero al mismo tiempo este proyecto sudamericano está siendo debilitado en todas sus dimensiones, alejándolo de su objetivo central, que es la construcción de un proyecto autónomo –más allá de lo exclusivamente comercial– a partir del cual la región se inserte soberanamente en el orden global.
La reciente Cumbre de las Américas mostró un vacío doble: evidenció la falta de interés estadounidense en la región, así como la falta de una visión regional propia por parte de los países que adhieren en este momento a políticas de orientación neoliberal.
La Argentina ha adoptado durante la gestión de Cambiemos con especial énfasis una política de apoyo incondicional y subordinación a la política exterior de los Estados Unidos, que ha sufrido constantes tropiezos materiales (biodiesel, acero, aluminio), por parte de la gestión del Presidente Trump.

¿Qué se negocia?

Más allá del secretismo con el cual los funcionarios argentinos manejan el tratado, son sumamente preocupantes los trascendidos sobre los detalles de la actual negociación que se está desarrollando entre ambos espacios regionales, que tienen una fuerte asimetría de capacidades productivas, financieras y tecnológicas.
El cuadro general que surge es el de una Unión Europea que no está dispuesta a ceder nada significativo que afecte su entramado productivo y social, mientras que el Mercosur parece apremiado a avanzar en un acuerdo, a pesar de las múltiples desventajas para sectores productivos locales. Especialmente dañinos parecen ser los efectos para la Argentina, país más industrializado que Uruguay y Paraguay, pero con ciertos segmentos industriales menos competitivos que algunos de Brasil.
Según la información disponible desde el lado europeo, el acuerdo aparece como desequilibrado. Mientras se exige que América latina reduzca aranceles en forma amplia, la Unión Europea sólo ofrece otorgar cuotas de importación en bienes sin elaborar que no afecten gravemente a ningún país o sector productivo interno. Estas cuotas, a su vez, no estarán libres de pagar aranceles.
Al mismo tiempo, la UE enfatiza en acordar en áreas en las que puede hacer valer su competitividad relativa: 1) propiedad intelectual (impacto fuertemente negativo sobre la industria de medicamentos); 2) denominación de origen; 3) compras gubernamentales: participación para europeos en igualdad de condiciones a nivel nacional, provincial y municipal; 4) e-commerce; 5) resolución de controversias en un Tribunal multilateral; 6) exportación de lácteos a América del Sur; 7) trato nacional a las empresas de servicios europeos; 8) libre navegación por los ríos y mares de países del Mercosur; 9) trabas al movimiento de profesionales sudamericanos hacia la Unión Europea; 10) exclusión de los servicios audiovisuales de las cláusulas de liberalización del Tratado; 11) liberalización automática de cualquier nuevo servicio que aparezca (lo que desprotege la actividad innovativa en nuestra región).

Impactos

El tratado ataca a sectores productivos en donde el Mercosur posee ventajas comparativas para el comercio internacional. Rechazaron en su momento la demanda del Mercosur de poder exportar un mínimo de 400.000 toneladas de carne vacuna, y hoy aceptan sólo 70.000 (provenientes de toda la región). El Mercosur, que viene retrocediendo sistemáticamente en casi todos los ítems negociados, ha reducido su demanda a una cuota de 100.000 toneladas. Si el Tratado rechaza tajantemente las exportaciones de carne vacuna del Mercosur, ¿qué se podría esperar de bienes y servicios de mayor valor agregado y que incorporan más contenido tecnológico? 
Es previsible que de firmarse el Tratado en las actuales condiciones, Argentina sufra impactos no sólo en diversos sectores relevantes de su mercado local local, sino en aquellas actividades que tienen presencia exportadora en Brasil, dónde nuestros productos industriales podrían ser desplazados por los europeos que entrarán en condiciones muy favorables. La industria autopartista argentina, entre otras, podría verse severamente afectada.
Los estudios de impacto del Tratado sobre la producción y el empleo realizados hasta el presente ofrecen resultados muy graves, y diversas cámaras sectoriales, a pesar de sus temores políticos, han señalado la peligrosidad de las cláusulas establecidas hasta la fecha. Informes críticos del Tratado han estimado, en principio, la potencial pérdida de 180.000 puestos de trabajo en el sector industrial, sin incluir los impactos sobre otras actividades que también serán afectadas y desplazadas por la competencia europea.

Condicionamientos

El tratado Mercosur-UE que el Gobierno está encarando, junto con la posibilidad del ingreso a la OCDE y la firma de un programa con el FMI, da a entender que la política exterior argentina va a contramano de las tendencias que prevalecen a nivel mundial en materia geopolítica. Por todo lo conocido, pareciera que el Mercosur está cediendo en todos los terrenos de la negociación, a cambio de mejoras insignificantes. Mientras la UE muestra una rigurosa conciencia de las “líneas rojas” que no desea traspasar, la dirigencia negociadora sudamericana parece no tener límites en materia de concesiones y renuncias a objetivos productivos o sociales. 
Cabe aclarar que el Tratado no ha avanzado aún más en su concreción y aprobación debido a las reticencias de países como Francia, Irlanda, Polonia y Dinamarca, que temen que algunos productos latinoamericanos afecten a sus productores locales. Estamos en presencia de un acuerdo muy desfavorable, como aquel que fue rechazado en 2005, en ocasión de la iniciativa norteamericana de un tratado de libre comercio continental. Se trata de un nuevo ALCA, pero en esta oportunidad con la Unión Europea.
Es imposible disociar la aceleración de las negociaciones –que se vienen prolongando desde el año 2004–, de la aparición de las gestiones neoliberales de los presidentes Temer en Brasil y Macri en Argentina. Es evidente la prioridad política que tiene el Tratado para dichas administraciones, sobre consideraciones relativas al desarrollo material y social de nuestra región. 

Dependencia

La falta de ejemplos “exitosos” (para ambas partes) entre países o regiones asimétricas que hayan firmado este tipo de acuerdos, inclusive dentro de la propia UE, refuerzan los temores respecto a las consecuencias que podría tener el Tratado. Sectores del poder más concentrado de nuestros países están tratando de cristalizar, en el plano internacional, compromisos permanentes para condicionar la libertad para la toma de decisiones de política económica de los futuros gobiernos de signo opositor.
En el caso argentino, de concretarse el Tratado, el impacto en materia de desocupación y, sobre todo, de pérdida de segmentos productivos medianamente sofisticados sería sumamente notorio, en tanto las ventajas estarían focalizadas en muy pocos sectores productivos, cuyos negocios no se traducirían necesariamente en mejores condiciones de vida para el conjunto de la población.
En este sentido, más que un tratado o acuerdo, nos encontramos ante la presencia de un proyecto que condiciona la soberanía nacional a partir de la destrucción de capacidades productivas y tecnológicas en un renovado intento de sometimiento a los intereses de los países más avanzados, y en detrimento de las mayorías populares.  
Por todo lo descripto anteriormente el actual acuerdo con la UE en gestión, en el caso de ser firmado, solo incrementará el grado de dependencia de nuestro país cediendo soberanía que obtuvimos a un costo muy elevado 

* Cátedra Abierta Plan Fénix Facultad de Ciencias Económicas, UBA.
Fuente:Pagina /12

TELAM:Despidos con tufillo a discriminación

Los trabajadores de Télam y el sindicato de prensa marcharon hasta las oficinas de Hernán Lombardi.La Comisión de Libertad de Expresión de Diputados citó a Hernán Lombardi por las cesantías en Télam

El presidente de Télam sostuvo que los 354 despidos en la agencia oficial se debieron a que tenían “un perfil muy ideológico”.
Los trabajadores de Télam y el sindicato de prensa marcharon hasta las oficinas de Hernán Lombardi. 
Un día después de que el Gobierno nacional confirmara que son 354 los despidos que efectivizó en Télam, los trabajadores de la agencia pública de noticias marcharon hasta las oficinas del titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, en el Centro Cultural Kirchner, para repudiar el recorte del 40 por ciento de la planta del organismo que implican los puestos de trabajo eliminados, exigir la reincorporación de los trabajadores y trabajadoras despedidos y denunciar “el vaciamiento” de los medios públicos. Acompañados de otros colectivos de trabajadores de prensa, sindicatos y espacios políticos, la columna –que según calcularon contó con más de dos mil manifestantes– mantuvo un corte de dos horas sobre el Metrobus de Corrientes y Paseo Colón para exigir que se abra un canal de diálogo con el Gobierno. La respuesta fue bastante diferente a la reclamada: “Enviaron a la Infantería de la Policía de la Ciudad de manera amenazante”, lamentó el delegado de Télam, Esteban Giachero, y agregó: “Ellos no quieren dialogar, pretenden desgastar a los trabajadores”. Las Comisiones de Legislación del Trabajo, Comunicaciones e Informática y Libertad de Expresión de Diputados citó a Lombardi a la Cámara de Diputados a que dé explicaciones. 

El segundo día de despidos masivos en la agencia informativa estatal comenzó con una asamblea abierta y culminó con una manifestación frente al CCK. La titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se hizo presente en la redacciòn  en solidaridad con los trabajadores. Uno de los delegados del Sindicato de Prensa de Buenos Aires en Télam, Esteban Giachero, describió como “indiscriminado” el plan de despidos aplicado desde el lunes por el Gobierno nacional y defendido a capa y espada por Lombardi y el directorio que maneja la agencia oficial de noticias por cuanto medio afín fueron consultados. “Están llegándole telegramas a compañeros de tres, cinco, seis y hasta 29 años de antigüedad. Hoy le llegó un telegrama a una compañera que estaba en la agencia desde el 83”, mencionó y remarcó: “Lo que podemos marcar es que se apuntó selectivamente contra la gente que estaba activa en las asambleas o defendía la aplicación del convenio colectivo”.
A las justificación política que Lombardi realizó el lunes de los despidos en Radio Mitre, diálogo en el que comparó la agencia informativa con “una sede más de Resistiendo con Aguante”, y con un descargo en su muro de la red social de Facebook donde celebró que con el recorte “ganaron el periodismo y los ciudadanos”, se sumó ayer la del presidente del directorio de Télam, Rodolfo Pousá, con una afirmación que rozó lo discriminatorio. “Nuestro objetivo es profesionalizar la agencia. Hubo un núcleo duro que no se sumó a esto y que decidió mantenerse con un perfil muy ideológico”, sostuvo en declaraciones radiales el funcionario que tras manejar Télam durante el gobierno de la Alianza le ganó un juicio indemnizatorio al Estado y ahora regresó al mismo puesto. 
El colectivo de trabajadoras y trabajadores de Télam desmintió una y otra vez a la conducción de la agencia. “Estamos en un limbo, en una constante incertidumbre, que es angustiante. Mientras un compañero recibe un telegrama a otro le llega un mail dándole la ‘bienvenida a la nueva Télam’ es una situación cínica”, denunció el delegado, quien aseguró que continuarán reclamando la reincorporación de todos los despedidos, mientras sostienen un paro por tiempo indeterminado y la ocupación pacífica de los edificios de Belgrano y Defensa.   
Tras la asamblea, que se realizó en la puerta de la sede de la agencia, en Belgrano 347, y la llegada de una columna de docentes de Ctera encabezados por los dirigentes Hugo Yasky, Sonia Alesso, Roberto Baradel y Eduardo López, la muchedumbre comenzó a marchar hacia el CCK. El estandarte con el rostro de Lombardi coronado con un “vaciador” encabezó la marcha, liderada por los Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) y el Sindicato de Trabajadores de Prensa (Sitrapren), los referentes de Ctera y de otros       espacios políticos. La movilización bajó por Belgrano y avanzó sobre Paseo Colón hasta el CCK, donde están las oficinas de Lombardi. Mientras la movilización avanzaba, algunos trabajadores iban recibiendo llamadas desde sus casas: “Recibí el telegrama”, confirmaban antes de abrazarse a otro de sus compañeros o compañeras para consolarse.  
Hasta ayer a la tarde, el número de telegramas de despedidos confirmados era menor a los 354 despidos anunciados por el titular del Sistema Federal de Medios Públicos y confirmados ayer a la mañana por Pousá. La numerosa concentración sobre Alem finalizó con un corte de dos horas frente al CCK. “Apareció la Infantería de la Policía de la Ciudad de manera amenazante y diciéndonos que iban a desalojarnos. Preferimos evitar una conflicto, porque esto será largo y la próxima marcha más numerosa”, adelantó Giachero. En tanto, las comisiones de Legislación del Trabajo, Comunicaciones e Informática y Libertad de Expresión citaron a Lombardi para que brinde explicaciones sobre los despidos. A la cita, que tendrá lugar el martes a las 18.30, asistirán los trabajadores y trabajadoras de la agencia. 
Fuente:Pagina/12

miércoles, 27 de junio de 2018

Sigue la protesta por la elección en la FUBA "El Rectorado reprime y convalida el fraude"


Imagen: Bernardino Ávila
Un estudiante detenido, varios más golpeados por la Policía de la Ciudad y un Rectorado vallado y rodeado de agentes es la imagen de la previa de la sesión en que una alianza de macristas y radicales avalarán la renovación de las autoridades de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) electas en un proceso denunciado como fraudulento por distintas agrupaciones estudiantiles, con apoyo de gremios y dirigentes políticos.
La represión que tuvo lugar esta mañana en el estacionamiento del Rectorado de la UBA, ubicado en Viamonte al 400, es la continuidad de una golpiza policial que anoche sufrieron varios estudiantes que intentaron tomar el edificio para garantizar su presencia en la sesión del Consejo Superior, donde quieren presentar las pruebas del “fraude”.

Ayer, en momentos en que estudiantes que militan en agrupaciones de izquierda ingresaron al edificio, fueron agredidos por personal de seguridad privada del Rectorado que les cerraron los ingresos y les descargaron la sustancia de los matafuegos que había en el lugar. Luego, en la vereda los esperó la Policía porteña, que golpeó a varios de ellos e intentó detenerlos.
Finalmente, la detención ocurrió esta mañana cuando a varios de los estudiantes autorizados para participar de la sesión prevista para las 10 se les impidió el ingreso por el estacionamiento del Rectorado, vallado en todo su perímetro. Cuando uno de los invitados intentó sortear la reja fue apresado por varios agentes que lo llevaron a un vehículo policial y una hora después lo trasladó a la Comisaría 1. Su nombre es Federico Fernández. 

La denuncia de las agrupaciones respaldada por Conadu, Conadu Histórica, UTE y CTEP, entre otras entidades gremiales y políticas, indica que en el congreso normalizador del sábado pasado y en el que se eligieron las autoridades que controlarán la federación hubo un “quórum irregular”, porque se contabilizó como presentes a delegados que no habían estado allí.

“La elección del sábado fue fraudulenta. Hay 65 delegados que no participaron. Lo que hay es un empate entre dos agrupaciones y la única solución es un congreso después de las elecciones (estudiantiles). Sin embargo, el Rectorado reprime y convalida el fraude”, sintetizó a Página/12 Adrián Lutvak, referente de La Mella y hasta ahora copresidente de la FUBA.
Lucas Tavolaro Ortiz, presidente del Centro de Estudiantes de Cs. Exactas, agregó: "Las autoridades de la UBA no pueden argumentar porque quieren reconocer esta elección fraudulenta y por ello no nos dejan pasar. Pero no es suficiente, los estudiantes tenemos claridad sobre lo que hizo la Franja Morada - Cambiemos en la FUBA y vamos a agotar todas las instancias posibles".
Los consejeros de las agrupaciones denunciantes tenían prevista su participación en la sesión de esta mañana para presentar las pruebas de su denuncia contra “el congreso trucho del sábado impulsado por Franja Morada y Cambiemos”, añadió el dirigente. Sin embargo, “fuimos reprimidos” en los accesos al edificio, añadió Julián Liparelli, de La Mella, a la vez que pidió “que se garantice la seguridad del compañero que fue detenido”.
Fuente:Pagina/12

martes, 26 de junio de 2018

La agencia Télam comenzó con los despidos y los trabajadores van al paro

Este lunes llegaron telegramas que argumentan una "reestructuración". La empresa advierte que va a "desvincular a empleados que no responden al perfil" que buscan. Lombardi confirmó que son 354 los despidos..
26 de Junio de 2018
La Agencia estatal de noticias Télam, que depende del titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, anunció este lunes que despedirá a 354 empleados “que no responden al perfil” que busca el directorio luego de meses de conflicto por el intento de ajuste denunciado por los trabajadores.
Los despidos comenzaron tras el paro de 24 horas que realizó la CGT y CTA y que tuvo un fuerte impacto dentro de la agencia. Por la mañana, algunos trabajadores de la Agencia ya recibieron un telegrama con el texto: “En virtud de la reestructuración general que se lleva a cabo en esa sociedad se le notifica que queda despedido a partir del día de la fecha”.

La comisión interna convocó a una asamblea general y resolvió un paro por tiempo indeterminado en todas las actividades de la agencia, ya sean administrativas, publicitarias y periodística. Además, se determinó la toma pacífica de las sedes de la calle Bolívas y del Avenida Belgrano y se convocó a otra asamblea, para este miércoles al mediodía para ponerle fecha a una marcha al Centro Cultural Kirchner, que está bajo la órbita de Lombardi.
También podés leer: Lombardi justificó los despidos en Télam: "Hoy ganó el periodismo"
Minutos después de que llegaran los primeros telegramas, se conoció el comunicado del directorio de la agencia estatal, que se publicó en el despacho de cables con el título “La Agencia Télam tiene futuro”, en el que se señaló que las autoridades decidieron “desvincular a empleados que no responden al perfil” que busca para la agencia.
Allí, el presidente de la agencia Rodolfo Pousá y el vicepresidente Ricardo Carpena denuncian que la Agencia Télam “fue víctima de la irresponsabilidad y del desmanejo del gobierno anterior, que utilizó 'lo público' para fines político-partidarios”, y señala que la agencia pasó de 479 empleados en 2003 a 926 en 2015.
“Seis de cada diez ingresos fueron contratados para tareas periodísticas. Sin embargo, la mayoría de las incorporaciones no contaban con formación ni experiencia en el área. Confundieron periodismo con propaganda partidaria”, agregaron.
“El abuso sistemático fue tal que en aquellos años incluso se utilizó el reparto de la pauta publicitaria de forma arbitraria y abusiva, confundiendo la labor periodística con las campañas políticas y manchando a la Agencia con casos de corrupción”, cuestionaron.
Luego de la denuncia, el directorio asegura que desde que asumieron en enero de 2016 se encontraron “con una Agencia en una situación económica y financiera compleja y delicada”, y se propusieron hacerla “más austera y eficiente”, lo que para ellos implica despedir personal.
“En dos años y medio fue mucho lo que avanzamos”, señalan y cargaron contra los 44 delegados sindicales, “que realizaron 61 medidas de fuerza en dos años y medio” lo que para las autoridades “pone en evidencia el hostigamiento del que fue víctima el directorio en una empresa del Estado que paga puntualmente los salarios, respeta las leyes y los convenios laborales y preserva las condiciones de trabajo”.
“Así construyeron un complejo entramado sindical, empresarial y legal para mantener cautiva a la agencia y coartar el trabajo libre de los verdaderos periodistas que se desempeñan en la empresa. Pretenden apropiarse de la línea editorial de la agencia pública de noticias como si fuera un botín político”, aseguraron.
“El esfuerzo de dos años y medio por profesionalizar la empresa siempre chocó con un grupo que confunde privilegios con derechos. Hoy, las decisiones de la Justicia nos permiten avanzar”, agrega el texto.
“En el camino de modernizar y de profesionalizar la empresa, y luego de una minuciosa evaluación en cada área, hemos decidido desvincular a empleados que no responden al perfil que buscamos para una agencia pública de noticias que debe avanzar hacia un mejor y eficaz funcionamiento. A esos empleados se les envió la carta documento correspondiente el viernes pasado y se les pagará la indemnización que establece la ley”, manifestaron.
“La nueva Télam será una agencia moderna, confiable y multiplataforma; líder en el mercado informativo nacional y regional, con proyección internacional, recuperando el orgullo de ser una empresa pública argentina y reconocida en todo el mundo por su confiabilidad. Télam tiene futuro y seguirá informando”, concluyeron.
Fuente:Tiempo Argentino

Unidad para no tocar fondo


El todo es predecible si se conocen de antemano las partes que lo forman. Las repasamos, a vuelo de pájaro. Participación de todas las vertientes de la Confederación General del Trabajo (CGT) y las dos CTA: una coincidencia con escasos (o nulos) precedentes desde el gobierno de Fernando de la Rúa. Cumplimiento altísimo en todo el país. Picos de ausentismo en los gremios docentes y los de transporte. Sin bancos, ni recolección de basura, con poca gente en la calle.
El paro general logró los objetivos previstos, fue contundente conforme se detalla en otras páginas de este diario. Lo saben sus promotores, la mayoría de la opinión pública, los partidos opositores que lo acompañaron. Lo deberían saber hasta las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI) si le interesaran esas cuestiones del vulgo. Lo entienden en la Casa Rosada, aunque, como esos boxeadores que recibieron una piña tremenda, muevan la cabeza negando el impacto.
El Gobierno, claro, elige sobreactuar su rol, repetir el trillado guion para estos casos. “El paro es político”, “no cambia nada”, “¿qué va a pasar mañana?”. Macanear es gratis pero apareja el riesgo de creerse las propias mentiras.
El clima de protesta y malhumor crece semana tras semana. No nació ayer de un repollo: viene germinando en las sucesivas movilizaciones exitosas que jalonan todo este año.
***
El presidente Mauricio Macri dispone de poco margen para hacer política económica porque se ató las manos al acordar con el FMI. La consecuencia no será la pasividad social que proponen Macri y su equipazo. Imposible porque en dos o tres meses (por fijar un plazo cualquiera) habrá tantos o más motivos para protestar que ayer. Se acrecentará el número de personas damnificadas por el programa económico. Más desocupados, subocupados, desempleados disimulados. Las alzas de precios de los alimentos, las tarifas y los remedios agravarán las penurias de los más humildes.
Dos notas publicadas el último domingo en PáginaI12 pintan la emergencia que el Gobierno intenta disimular mencionando nombres de dirigentes, como si ellos fueran la masa de trabajadores que se manifestó ayer. Una, firmada por la periodista Laura Vales, cuenta como se organizó una olla popular en una escuela del Bajo Flores, en la Ciudad Autónoma. <https://www.pagina12.com.ar/124069-hambre-y-frio-en-la-escuela>. Lejos de ser una aguja en un pajar próspero, constituye una muestra de cómo castiga el ajuste en barrios y sectores populares. Pibes y pibas que se alimentan mal, porque la plata no alcanza. Repercusión en su estado de ánimo y en el rendimiento escolar. 
La otra es la muerte de un chico electrodependiente. Edesur le cortó la luz a su familia que no pudo afrontar una deuda exorbitante, impagable. El hogar no estaba inscripto entre los electrodependientes, lo que hubiera transformado la tragedia en delito. Pero la magnitud de la tarifa y la falta de respuesta tempestiva o solidaria de la concesionaria encienden otra señal: seguramente no se tratará de un hecho aislado.
***
La nómina de sindicatos comprometidos con la medida de fuerza pinta la postal de época. Las CTA y los docentes en particular, la Corriente Federal de la CGT y los Camioneros son puntales en la lucha contra el ajuste. “Están en el inventario” de la oposición, por combatividad y coherencia.
A su modo, son más significativos los aportes (acaso tardíos pero decisivos) de gremios muy transigentes con el Gobierno, por usar un eufemismo. No reaccionan para disfrazarse de revolucionarios, ni de reformistas. Sencillamente, actúan en defensa propia. La involución de la política económica interpela a Andrés Rodríguez (Unión de Personal Civil de la Nación) o a Gerardo Martínez (Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina. Ricardo Pignanelli, titular del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) despierta de un prolongado letargo.
El compromiso con el FMI exige cesantías masivas en los estados nacional y provinciales. Los representantes de los empleados estatales como Andrés Rodríguez algo tienen que responder.
Los recortes en obras públicas exigidos por el FMI motivan el realineamiento de Gerardo Martínez. Oficialista por vocación más allá de quién esté en la Rosada, atisba decenas de miles de despidos en su sector.
La recesión impacta en ramas de actividad que venían zafando o sin caer a pique, como la automotriz. 
El huracán macrista fuerza a dirigentes a definirse y, acaso, hasta a patrones y gremialistas a mover módicas fichas juntos.
*** 
“Convencer a las personas para vivir peor no es sencillo” escribió el académico Martín Schapiro en la revista Nueva Sociedad. Macri lo intenta, empero. Convoca a la ciudadanía a una suerte de gesta masoquista: pide sacrificios cual si ejecutara ordenes de una deidad pagana. Primero hay que saber sufrir, el bienestar llegará luego, vaya uno a saber cuándo… no en el segundo semestre. 
El frío y la ausencia de políticas regulatorias ahondan los daños de la economía. El gran empresariado banca al oficialismo, pero no concede una tregua en su acumulación de ganancias. Las concesionarias de servicios públicos son arquetípicas.
El paro exitoso enfrenta y desnuda a Macri: su política es crecientemente impopular.  Tonifica a la dirigencia sindical, a condición de mantener constancia en la oposición. Los discursos de ayer exigieron cambios de modelo económico y no generalidades como “ser escuchados”, “que el gobierno entienda”. Un avance que puede mejorar la legitimidad de la dirigencia, aunque siguen pendientes de resolución las divisiones internas, la falta de conducción y liderazgos del movimiento obrero.
¿Qué pasará hoy? Habrá actividad solo hasta las tres de la tarde, esperando el minimilagro en Moscú. ¿Y los días subsiguientes? Volverá la actividad tibia, menguante porque la recesión crece, la demanda popular baja y las pymes, que ayer adhirieron, están con el agua al cuello.
La jornada dejó, pues, vencedores y vencidos. Los perdedores del modelo avanzaron un par de casilleros. La partida, la historia y las luchas continuarán. 
Fuente:Pagina/12

viernes, 22 de junio de 2018

Una pulseada para liderar la FUBA Con apoyo de peronistas y socialistas, el radicalismo buscará recuperar la conducción de la FUBA, que perdió en 2001.

Una pulseada para liderar la FUBA
Con apoyo de peronistas y socialistas, el radicalismo buscará recuperar la conducción de la FUBA, que perdió en 2001. La izquierda y los independientes llaman a un frente de unidad para impedirlo.
El futuro de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) se definirá mañana, cuando Franja Morada y otras agrupaciones intentarán realizar un congreso para elegir nuevas autoridades y desplazar a la actual conducción de la federación, encabezada por agrupaciones de izquierda e independientes. La convocatoria es denunciada como irregular por gran parte de las organizaciones estudiantiles, que evalúan convocar a otro congreso o conformar un gran frente de unidad para evitar que la agrupación radical llegue a presidir la federación.
El estatuto de la FUBA indica que, para poder realizar la elección de la organización estudiantil que nuclea a los centros de estudiantes de todas las facultades de la UBA, deben estar presentes al menos 66 de los 130 delegados de los centros, y esa es la variable que definirá qué congreso, de confirmarse la convocatoria a más de uno, contará con la posibilidad de votar autoridades. 

El primer llamado a elecciones fue lanzado el martes por los presidentes de siete de los trece centros de estudiantes de la UBA. La iniciativa cuenta con la firma de los presidentes de los centros de las facultades de Ciencias Económicas, Medicina, Derecho, Ciencias Sociales, Odontología, Agronomía e Ingeniería, que representan a las fuerzas Nuevo Espacio (ex Franja Morada), Nuevo Derecho (socialismo), UES (peronismo), AFO (aliada de Franja), LAI (independientes de derecha) y MLI (independientes de centroizquierda). 

“Luego de más de 5 años sin renovar autoridades, y con una federación paralizada, la mayoría de los centros de estudiantes hemos decidió tomar la iniciativa. Los estudiantes nos cansamos del vaciamiento político y económico de nuestra herramienta de organización gremial”, aseguraron esas agrupaciones en un comunicado, y llamaron a sesionar el sábado al mediodía, en Uriburu 950. 
Con fuertes críticas a la convocatoria, las organizaciones La Mella, Sur, Estudiantes por la Liberación, Colmena, La Cámpora, Nuevo Encuentro, Megafón, Universidad Futura, CUPP, JP Descamisado, PCCE, Kolina universidad, La Tropilla, La Emergente, Democracias Socialista, Cienfuegos, FANA, La Dignidad y CEPA publicaron un comunicado conjunto, en el que llaman a la unidad para evitar que la radical Franja Morada recupere la conducción de la FUBA, que perdió en 2001. “La única salida que pone por delante los intereses de lxs estudiantes es dejar de lado diferencias y mezquindades, hoy menores, conformando la más amplia unidad. Una unidad que sea capaz de conformar un frente político que le ponga un freno a las políticas de la Franja Morada, el Rectorado y Cambiemos, en sintonía con la lucha que nos ha encontrado en las calles estos años junto a lxs trabajadorxs, el movimiento feminista y los movimientos sociales, como así también en defensa de la educación pública”, aseguraron. 

Desde el Partido Obrero, que hoy preside la FUBA junto a La Mella, convocaron “a todas las agrupaciones que se reclaman opositoras del Gobierno y el Rectorado” a “movilizarse para derrotar el intento de copamiento de la FUBA”, y aseguraron que “es fundamental el pronunciamiento de todos los centros y agrupaciones para defender la federación de las garras de Barbieri y Cambiemos, denunciando el congreso trucho”. 

El copresidente de la FUBA por La Mella, Adrián Lutvak, aseguró que “el Rectorado pretende que la UBA se arrodille ante los ataques del Gobierno a la educación pública. Para eso, necesitan una federación pasiva que no enfrente de lleno las políticas educativas del macrismo, como lo venimos haciendo. Advertimos que en su afán de quedarse con la FUBA, las agrupaciones del rectorado preparan un fraude, truchando delegados para poder realizar su congreso paralelo”. 
Informe: Inés Fornassero.
Fuente:Pagina/12

jueves, 21 de junio de 2018

UNA ACCION COMPLETAMENTE PLANEADA: EL 20 DE JUNIO El Fondo aprobó el préstamo y enviará US$ 15 mil millones inmediatamente

El crédito stand-by incluye un fuerte plan de ajuste.

(Foto: Presidencia)
20 de Junio de 2018
El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario aprobó este miércoles 20 el acuerdo stand by de tres años de duración y por 50 mil millones de dólares para Argentina, de los que U$S 15.000 millones estarán disponibles de manera “inmediata”, según aseguró el organismo multilateral en un comunicado.
Ni el comunicado ni la conferencia de prensa posterior que ofrecieron la titular del FMI, Christine Lagarde, acompañada por el jefe del Hemisferio Occidental del organismo, Alejandro Werner, y Roberto Cardarelli, jefe de la misión del FMI para la Argentina, aportaron novedades respecto del acuerdo o el uso de los fondos a prestar.
Tal como ya estaba estipulado, el FMI autorizó al gobierno a emplear U$S 7500 millones (la mitad de los U$S 15.000 millones iniciales) para “respaldo presupuestario”, un eufemismo técnico que equivale a decir que serán usados para cubrir el déficit fiscal.
Lagarde volvió a enfatizar que la ideación del plan de ajuste asociado al préstamo, junto con su gestión, eran asuntos argentinos. “Este es un plan que fue diseñado y es propiedad de las autoridades argentinas”, dijo. Se trata de un ángulo que el FMI y el gobierno nacional han empleado desde que el presidente Mauricio Macri anunció que su administración recurriría al FMI para salir del atolladero financiero en el que se encuentra.
De todas formas quedan claros los objetivos del plan, sobre los cuales el FMI hará los controles trimestrales a fin de verificar su evolución: reducción del déficit fiscal y de las necesidades de financiamiento para paliar el déficit público; reducir el peso de la deuda pública en el total del gasto; y reducir la inflación.
El otro punto que los técnicos del Fondo seguirán en detalle será el de las actividades del Banco Central, un instrumento medular para el logro de esos objetivos. Para ello, el FMI considera que es sustancial “fortalecer” la independencia del BCRA, según aseguró en el comunicado y en la conferencia de prensa.
El uso de los 35 mil millones de dólares restantes quedará supeditado “a exámenes trimestrales a cargo del Directorio Ejecutivo” del FMI. El organismo multilateral de crédito observó que “las autoridades (argentinas) han anunciado la intención de girar contra el primer tramo del acuerdo, pero posteriormente tratarán el resto del acuerdo con carácter precautorio”. En otras palabras, el uso de ese resto de dólares estará sujeto a condiciones que Argentina deberá cumplir.
Como parte del acuerdo, Argentina acelerará su ajuste fiscal, que deberá ser del 1,3% del Producto Bruto Interno (PBI) durante 2019 frente al 2,2% previsto anteriormente. Ello deberá figurar en el Presupuesto del año próximo, para lo cual el oficialismo ya comenzó a presionar a la oposición en el Congreso para lograr su visto bueno.
Este ajuste incluye la reducción del empleo público y el congelamiento de beneficios salariales de estos trabajadores. También una reformulación del sistema previsional a fin de reducir el gasto en ese rubro, incluido el uso del Fondo de Garantía de sustentabilidad (FGS) para gastos corrientes.
También se prevé una reducción de los aportes estatales a las empresas públicas y no se descartan despidos en las mismas. Las denuncias realizadas por los trabajadores de la agencia de noticias Telam, en el sentido de que sus autoridades preparan cientos de despidos, se inscriben en este terreno.
El plan, descripto en la carta de intención que presentaron el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el entonces titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, el pasado 12 de junio, incluye una disminución en las inversiones de capital y en las obras públicas.
Otro aspecto vinculado a mejorar los ingresos del Tesoro ante la eliminación de los aportes del Banco Central es el de la venta de activos estatales, como las acciones en poder del FGS o empresas energéticas estatales. Ya están a la venta dos centrales generadoras de electricidad junto con Transener, firma que transporta la energía de alta tensión por buena parte del país.
El plan de ajuste ha provocado reacciones entre los sectores afectados. El próximo lunes 25, la CGT realizará un paro nacional de 24 horas del que participarán todas las líneas internas de esa central, además de las CTA, los sindicatos nucleados en sectores combativos y los movimientos sociales.
Fuente:Tiempo Argentino

martes, 19 de junio de 2018

"El FMI nos coloca en el peor de los mundos"

Cambiemos, el Frente Renovador y Argentina Federal no asistieron a la sesión especial

A pesar de que la oposición no consiguió el quórum necesario para sesionar y obligar al Gobierno nacional a someter el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional al Parlamento, el titular de la bancada del Frente para la Victoria-PJ, Agustín Rossi, denunció que el Ejecutivo no quiere discutir los condicionamientos del organismo internacional.
"No estamos hablando de la tasa de intereses, ni del monto ni de los meses en que se va a devolver. Lo que estamos hablando y el gobierno no quiere claramente discutir, ni quiere que se sepa, son los condicionamientos que pone el FMI para otorgar el crédito". Con esa frase Agustín Rossi, presidente del bloque de diputados del Frente Para la Victoria, denunció en la frustrada sesión de la Cámara baja la resistencia del gobierno a someter a la opinión del Congreso el acuerdo de 50 mil millones de dólares que suscribió con el organismo internacional.
El FpV había convocado la sesión de esta mañana junto con el Frente de Izquierda para rechazar los condicionamientos del Fondo y reclamar una interpelación al ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. Sin embargo, el vicepresidente de la Cámara, José Luis Gioja (FPV) tuvo que levantarla porque había 68 de los 123 necesarios para habilitar una sesión. “No conseguimos quórum, pero dejamos testimonio de que la vuelta al FMI es la peor salida a la crisis en la que el Gobierno nos sumió a todos los argentinos”, destacó luego el bloque en un comunicado.
En su intervención, Rossi advirtió que el presidente Mauricio Macri metió a todos los argentinos “en el túnel del tiempo” porque el acuerdo significa “volver 20 años atrás la historia económica de este país". “Nos ubica en el peor de los mundos; sólo 30 países, de los 200 países que existen tienen deuda con el FMI”, puntualizó el diputado, quien advirtió que “lo peor está por venir”. “No hay motivo para que los argentinos sintamos que este camino que decidió el Presidente para la economía nos lleve a un lugar mejor al que estábamos”, subrayó luego.
El legislador santafesino también advirtió que la negativa del Presidente a someter el pacto al voto de los diputados se explica por su propósito de ocultar los condicionamientos del Fondo. “El gobierno ha venido escapando a este debate. Al mismo tiempo, ha dicho a los argentinos que es beneficiosos para el país. ¿Si es tan beneficioso, por qué no quiere discutirlo en el Congreso de la Nación con los representantes del pueblo, de cara al conjunto de la sociedad?”, se preguntó.
Rossi subrayó que el acuerdo con el FMI “no nos va a llevar a un lugar mejor al que estábamos” porque la auditoría del Fondo “quita mayores condiciones de libertad al país para llevar adelante una política económica”. “Creemos que esas condicionalidades hacen que este crédito deje de ser ordinario y necesite de la aprobación parlamentaria para concretarse” insistió el diputado.
Luego, y en el marco de los recientes cambios en el gabinete de Mauricio Macri, apuntó contra el ex ministro de Finanzas y actual presidente del Banco Central, Luis Caputo. Rossi aclaró que “fue la toma de deuda desmesurada” uno de los motivos centrales por los que los mercados le dieron la espalda al Gobierno y luego estalló la corrida cambiaria. “Espero que el Senado rechace su pliego porque si hay alguien que no está en condiciones éticas de ser presidente del Central se llama Caputo”, dijo Rossi. Y agregó que el ex ministro “pasó toda su carrera del otro lado del mostrador y ahora nos quieren hacer creer que porque está de este lado va a defender los intereses de todos los argentinos”.
Fuente:Pagina/12

lunes, 18 de junio de 2018

No son los nombres. El problema es el proyecto


Imagen: Joaquín Salguero
 
El Gobierno acaba de destituir al ministro de Producción Francisco Cabrera. El funcionario deja su cargo en la cartera de producción con un saldo lamentable. Caída del consumo de un 30 por ciento en la mayoría de los productos producidos por nuestras fábricas, suba de importaciones de un 60 por ciento promedio en bienes finales en los últimos 2 años, uso de la capacidad instalada en la mayoría de los sectores productivos en poco menos del 60 por ciento y eliminación de todos los programas de financiamiento para pymes que quedaban en el ex Ministerio de Industria. Todo esto genero el cierre de más de 7 mil pymes y la pérdida de 75 mil empleos del sector industrial.

 Poco tiempo después de asumir presento el “Plan Productivo Nacional”, un título grandilocuente a los que nos tiene acostumbrado el actual Gobierno. En el mismo había un capítulo que se llamaba “Estrategia Australia” donde planteaba que nuestro País debía tomar como ejemplo las transformaciones que se habían producido en dicho país sin mencionar en ningún momento que basa su economía en agricultura, minería, servicios y muy poca industria. El detalle es que Australia tiene 23 millones de habitantes y Argentina el doble por lo cual para generar  crecimiento colectivo debe tener a la industria como motor de desarrollo. Pero lo más grave del plan es que proponía un esquema de “Reconversión Productiva”, para aquellas pymes que no pudieran ser competitivas. Para ser claros, si las empresas no podían competir con industrias de otros países debían adaptarse al nuevo esquema y reconvertirse. Esta es una discusión falsa desde todos los ángulos porque, aunque en nuestro país un sueldo es 5 veces mayor a lo que cuesta un salario en medio Oriente, el gran problema no está en la parte del costo laboral sino en el resto de la estructura productiva, como logística, financiamiento, comercialización etc., que son temas regulados por el Estado. Lo que finalmente sucedió es que una gran parte se “reconvirtieron” en importadores.

Esta etapa del Ministerio de Producción también será recordada por haber propuesto la rebaja de todo los aranceles industriales de importación para sellar el acuerdo Mercosur-Unión Europea y de esa forma nuestro país pueda venderle a Europa mayor cantidad de productos agropecuarios. El ex ministro tuvo además declaraciones poco felices cuando tildo de “llorones” a los industriales o cuando manifestó que ninguna pyme cierra por aumento de tarifas.

De todas maneras  tenemos que tener claro que esta no es una cuestión de nombres para no caer en la trampa que siempre propone el neoliberalismo, en la cual hace responsables a los hombres, nunca al modelo. El problema principal no radica solamente en la caída del consumo, la producción o la suba de importaciones. Lo que no cierra por ningún lado es este proyecto político que no tiene a la producción y al trabajo como políticas de estado y en ese sentido, aunque cambien las figuras, el gobierno parece decidido a profundizar el rumbo político que ha llevado hasta hoy.
* Presidente de CIMA - Dirigente de CGERA.
Fuente:Pagina/12

jueves, 14 de junio de 2018

Los bancos, la política y la crisis financiera actual




Por Alberto Couriel


 
Licenciado en Economía. Senador de la República Oriental del Uruguay por el Frente Amplio. Profesor Emérito de la Facultad de Ciencias Económicas - Universidad de la República

-
La crisis internacional deja al descubierto que los mercados financieros son quienes siguen mandando y que lo financiero predomina sobre lo productivo. Sin políticos decididos, el fin de la crisis es una utopía. ¿Hacia qué escenario vamos?
El régimen capitalista, predominante en el mundo internacional actual, avanza sobre la base de un acelerado proceso de innovaciones y de una extraordinaria velocidad de los cambios tecnológicos. El capitalismo industrial generó un fuerte crecimiento e importantes transformaciones económicas. Pero también generó enormes diferencias entre países desarrollados y subdesarrollados, con procesos de exclusión y de regresivas distribuciones del ingreso. En las últimas tres décadas ese capitalismo industrial se torna en capitalismo financiero y en la actualidad sufre una de las más importantes crisis. La ideología económica ha sido muy relevante en la generación de la crisis financiera que se vive en el mundo desarrollado y en las soluciones propuestas para intentar resolverla.

Hay, sin duda, un proceso de globalización real aunque también existieron discursos que se pueden denominar como ideología de la globalización centrada en la concepción neoliberal. Se planteaba, por ejemplo, que la globalización obligaba a la necesidad de las privatizaciones. También se decía que la globalización requería de la apertura y liberalización del comercio exterior, pero los países desarrollados mantenían subsidios a las exportaciones agrícolas, ayudas a los productores rurales, cuotas y contingentes, picos arancelarios y progresividad arancelaria para la importación de ciertos rubros manufactureros.

En cambio, en materia financiera la globalización era real, no era ideológica. Un movimiento de la tasa de interés en el mundo desarrollado tenía efectos inmediatos en el resto del mundo, influyendo además sobre las relaciones cambiarias. La globalización financiera es fruto de un proceso de liberalización financiera, impulsado por Estados Unidos a través de los organismos financieros internacionales como el FMI y, especialmente, por los avances tecnológicos en materia de informática. Estas innovaciones permiten utilizar el dinero en múltiples operaciones diarias de carácter especulativo para obtener ganancias. Por ello, los movimientos financieros superan ampliamente las necesidades financieras del comercio internacional y de las inversiones directas extranjeras, estimándose actualmente en alrededor de 4 billones de dólares diarios. Adquieren un alto grado de autonomía e inclusive, las grandes empresas transnacionales obtienen mayores ganancias por la vía de operaciones financieras que de sus propias actividades productivas. La propia globalización financiera les otorga un enorme poder nacional e internacional a las grandes instituciones financieras que influyen, nítidamente, en las políticas económicas de los distintos países.

Por lo tanto, lo financiero pasa a predominar sobre lo productivo. La estabilidad financiera, la estabilidad de precios, el déficit fiscal, la garantía de pagos de los servicios de la deuda externa y alcanzar una buena imagen en el mercado financiero internacional pasan a ser objetivos prioritarios de la política económica. Detrás de estas prioridades surge la concepción neoliberal, que impulsaron los gobiernos de Thatcher en Inglaterra y de Reagan en Estados Unidos y que se promovieron en América latina, en la década de los noventa, bajo la influencia de los organismos financieros internacionales.

Esta concepción plantea la mínima intervención del Estado, porque el libre juego del mercado y el accionar del sector privado están en condiciones de atender todos los problemas económicos y sociales de los distintos países. Para ello, plantean la necesidad de procesos de privatizaciones, liberalización comercial y financiera, desregulación y flexibilidad laboral. Es una concepción que privilegia al capital con respecto al trabajo y que en su aplicación genera procesos de exclusión y de regresiva distribución del ingreso.

La crisis financiera de 2007-2008 se inicia en Estados Unidos y es fundamentalmente causa del proceso de liberalización y desregulación de los mercados financieros y especialmente de la extraordinaria capacidad del régimen capitalista en la generación de procesos de innovación, como la titularización y los derivados, que multiplicaron la especulación y tuvieron profundos efectos negativos. La crisis desnudó los mitos de la concepción neoliberal. La autorregulación de los mercados fracasaba, no todo lo que hacía el sector privado era virtuoso y fue imprescindible la intervención del Estado y, por lo tanto, de la política y de los políticos, para resolver la situación. El propio gobierno de Estados Unidos, acompañado por el de Inglaterra, realizó elevados rescates financieros para atender la falta de liquidez e insolvencia de algunas instituciones financieras. Pero, junto a ellas, se plantearon medidas keynesianas donde la prioridad pasa de lo financiero a la atención de lo productivo y especialmente del empleo, aunque esta etapa no tuvo mucha permanencia. Las grandes instituciones financieras volvieron a obtener elevadas ganancias, a pagar altas primas a sus ejecutivos y, seguramente, a influir sobre los cambios en la orientación de la política económica.

En Estados Unidos, si bien el gobierno de Obama intenta buscar mecanismos para atender prioritariamente el empleo, surge con fuerza en el partido republicano la línea conservadora del Tea Party. Estos plantean la necesidad de asegurar la confianza del sector privado para que invierta y genere crecimiento y empleo. Dicha confianza se lograría sobre la base de una mínima intervención del Estado, rebajas del gasto público y de los impuestos, estabilidad y equilibrio fiscal. La mayoría de los republicanos en la Cámara de Diputados facilita el predominio de esta tendencia, que limita la creación de empleo por la debilidad de la demanda interna, de las familias endeudadas y del gasto público. La política monetaria de Estados Unidos no es suficiente para generar demanda. La tasa de interés está hace tiempo en límites muy bajos, cercanos a cero, y se extenderá por lo menos hasta 2013. La política de expansión monetaria de la Reserva Federal no aumenta el crédito, en la medida que los bancos privados compran títulos de deuda que les originan mayor seguridad y más ganancias que la colocación de préstamos. Habrá que esperar el proceso electoral de 2012.

La crisis financiera se inicia en Estados Unidos pero sus mercados financieros siguen predominando. Standard & Poor’s bajó la calificación de la deuda norteamericana de AAA a AA+. Sin embargo, los inversores financieros buscaron los títulos más seguros, que fueron los emitidos por el gobierno de Estados Unidos. A nuestro criterio las calificadoras de riesgo no tienen ninguna credibilidad, son objeto de críticas muy profundas sobre su accionar y actúan en forma pro-cíclica. Grandes empresas con calificación AAA han quebrado. Cuando un país se debilita, las calificadoras le bajan sus notas, consiguiendo la profundización de su crisis. Pero más grave aún: critican las políticas económicas de los distintos países y, en función de sus concepciones o recetas, determinan las calificaciones correspondientes. Nos parece insólito que pretendan que los países sigan su ideología o sus consejos conservadores. Deberían surgir mecanismos para sancionarlas y sobre todo para que dejen de tener influencia en los movimientos de capitales, ya que están influyendo muy negativamente en la crisis actual.
La crisis demostró que el dólar era la única moneda de reserva y que el centro financiero de Nueva York no tenía sustituto. Es evidente que China, el acreedor más importante de Estados Unidos, desea una nueva moneda de reserva. Es posible que en el futuro se llegue a un acuerdo para contemplar las aspiraciones de esta potencia emergente. Pero en el corto plazo es difícil sustituir al dólar en sus principales funciones.

La crisis europea es más profunda y se retoma con los graves problemas de Grecia.
Desde hace unos años las estadísticas griegas no eran confiables ya que tienen un elevado endeudamiento externo y un déficit fiscal considerable. Recordemos que la Unión Europea tiene políticas monetarias y cambiarias comunes –derivadas de una moneda común, el euro– pero cada país conserva su propia política fiscal.

El primer tema a analizar era si la Unión Europea, como tal, se hacía cargo de la situación financiera de uno de sus países miembros de la zona euro en dificultades. Por ejemplo, se planteó la posibilidad de usar la vía de emisión de eurobonos respaldados por la UE. La respuesta fue negativa ya que los países con mayor poder no estaban dispuestos a pedirles a sus contribuyentes ningún tipo de sacrificios por los desbordes de los griegos. Las consideraciones político-electorales seguramente no eran ajenas a estas decisiones.
Una segunda alternativa era una reestructuración de la deuda griega. Ello significaba una rebaja de los intereses, un alargamiento de los plazos y una quita de capitales. Pero los principales bancos acreedores eran franceses y alemanes y no estaban dispuestos a negociar pérdidas. Eran bancos que habían recibido rescates elevados por la crisis del 2008, que se habían recuperado con altas ganancias y nuevamente con pago de altas primas a sus ejecutivos. Tenían el apoyo de dos instituciones básicas, como el Banco Central Europeo y el FMI, que frente a situaciones de esta naturaleza privilegian los requerimientos de los acreedores financieros.

El Banco Central Europeo centraliza su accionar en la estabilidad financiera y especialmente en la estabilización de precios. Los objetivos de crecimiento y empleo, tal como en la Reserva Federal, no constan entre sus finalidades. El FMI siempre privilegia los objetivos financieros sobre los productivos. Las instituciones financieras privadas tuvieron una muy alta responsabilidad en la generación de la crisis financiera global, especialmente a través de los procesos especulativos. Contaron con la invalorable ayuda de gobiernos que efectivizaron procesos de desregulación porque entendían que los mercados financieros estaban en condiciones de autorregularse. Las instituciones financieras generaron la crisis y también generaron los elevados déficits fiscales derivados de los altos rescates que ellas recibieron. Cuando prestan corren riesgos, pero no están dispuestas a asumirlos y consideran que tienen poder para ello. En esencia, el poder y el accionar de las instituciones financieras se ubican en el centro de la actual crisis que vive el mundo desarrollado.

Los países con situaciones críticas fueron obligados a drásticos ajustes económicos para asegurar el cobro de las instituciones financieras acreedoras. En el caso de Grecia se le obligaba a bajar el gasto público, los salarios y las pensiones, a privatizar empresas para recibir más ingresos y a aumentar impuestos. Las consecuencias naturales de estos procesos de ajuste son la caída de la demanda interna pública y privada, lo que unido a la falta de competitividad por un euro relativamente apreciado (que sólo le sirve a Alemania), termina en una fuerte caída del PBI. La caída del producto significa menores ingresos fiscales y, por lo tanto, nuevamente incrementos del déficit fiscal y dificultades para pagar los servicios de la deuda. Se genera una suerte de círculo vicioso, en el que cada ajuste significa nuevos ajustes, con más desocupación, más pobreza y más problemas sociales con las inevitables consecuencias políticas. Las instituciones de la Unión Europea se demoraron mucho en atender estos problemas y la situación de Grecia se fue agravando, con efectos colaterales en Irlanda y Portugal y, especialmente, en países con economías más importantes como España e Italia.

En junio de 2011 se le otorga un fuerte rescate a Grecia y, por primera vez, aunque en forma voluntaria, los acreedores financieros, especialmente los bancos privados acreedores, acceden a pérdidas de 21 por ciento, especialmente por rebajas de tasas de interés y alargamiento de plazos. Pero ya era tarde, la deuda griega crecía y se volvía prácticamente impagable. Portugal e Irlanda también habían recibido rescates, pero lo relevante era la incertidumbre que generaban las situaciones de España e Italia, pese a los apoyos recibidos del Banco Central Europeo.

En octubre de 2011, cuatro meses después, se plantean diversas medidas: un aumento del fondo de rescate, que pasa de 440 mil millones de euros a un billón de euros, inclusive con una ventanilla para recibir fondos de países emergentes –que en la reunión del G20 no aceptaron–; la recapitalización de los bancos privados que lo requieran por vía privada o con apoyos de instituciones públicas, y un nuevo monto de rescate para la economía griega. La novedad era que se les pedía a los bancos acreedores que aceptaran, ya no una quita de 21 por ciento como en junio, sino ahora de 50 por ciento.
Tal vez, un año atrás una solución de este estilo hubiera permitido a Grecia resolver su crítica situación pero, seguramente, vuelve a ser tarde. Surgen, entonces, una serie de interrogantes: ¿Podrá Grecia pagar su deuda a los bancos con sus continuos ajustes? ¿Cómo hace Grecia para crecer sin demanda interna y sin competitividad? ¿Cómo resuelve sus problemas sociales y cuáles serán las consecuencias políticas?

Estas medidas atienden los problemas financieros de corto plazo pero no aseguran crecimiento ni mejoras del empleo para los principales países afectados. Mientras tanto, el G20 en su reunión de Cannes, en noviembre de 2011, le otorga más poderes al FMI que funciona como una especie de secretaría técnica. Las propuestas del FMI, derivadas de su publicación sobre “Las perspectivas mundiales”, atienden a resolver la estabilización financiera (resolver los problemas de los bancos privados), la consolidación fiscal (bajar el déficit fiscal por la vía de rebajas en el gasto público), la estabilización de precios, el pasaje de la demanda pública a demanda privada y una especie de reequilibrio externo basado en que los países con superávits aumenten su demanda interna, aprecien su moneda (léase China) para que los países con déficits puedan mejorar sus niveles económicos. En noviembre de 2011 el FMI aparece más sensible que la Unión Europea a las necesidades del crecimiento y el empleo, en línea, como es habitual, con la posición sustentada por el gobierno de Estados Unidos.

La ideología imperante genera problemas económicos y sociales y se aprecia una clara tendencia a que los partidos políticos en el gobierno pierdan poder y no sean reelectos. ¿Podrán los partidos políticos europeos modificar la preponderancia de los mercados financieros y sus consecuencias ideológicas para influir sobre la política económica? Los ajustes requieren más ajustes y profundizan la crisis, que además impide pagar la deuda. Se requiere el predominio de lo productivo sobre lo financiero. ¿Cuántos años precisará la Unión Europea para superar esta crisis?
Ahora la preocupación surge de los mercados, no sólo por el déficit fiscal y el endeudamiento, sino también por la ausencia de crecimiento. La volatilidad de las bolsas es muy elevada e “incertidumbre” es la palabra más utilizada para el análisis de los mercados financieros. Pero mientras estos sigan predominando sobre la política y los políticos, es factible que la crisis tenga continuidad. Queda en evidencia que la política no pudo controlar ni regular adecuadamente los mercados financieros, siendo también responsable de esta crisis. Los mercados financieros son quienes mandan, los políticos no quisieron, no supieron, no se animaron y no enfrentaron a las instituciones financieras que dominan dichos mercados. No lo hicieron por intereses económicos o por razones ideológicas y no regularon ni controlaron a aquellos.

La crisis social es fuerte y la desazón de los jóvenes es muy profunda. Pierden sus empleos y tienen dificultades para conseguir otros nuevos, aumenta el valor de las matrículas (que se multiplican entre tres y cuatro veces) en las universidades públicas e, inclusive, les cortan cursos por deficiencias de financiamiento para pagar a los docentes.

Es por esto que aparecen movimientos populares como “los indignados” y nuevas formas de protesta, porque sus expectativas son muy pesimistas e incluso se llega a cierto grado de desesperanza.

Impacto de la crisis en el Sur

Una de las novedades de la crisis de 2008 fue el desacoplamiento de la economía china, que mantuvo altos ritmos de crecimiento económico. Su actividad económica no muestra afectación por las crisis de Estados Unidos y Europa. Un crecimiento de China de 10 por ciento asegura un crecimiento de 4 por ciento de los países de América del Sur. El dinamismo chino ha facilitado altos precios internacionales de los recursos naturales, constituyéndose en un factor relevante del crecimiento de nuestra región en los últimos años. Este es uno de los factores que permite a los países sudamericanos afrontar la crisis internacional con mayor fortaleza financiera y comercial.
No olvidemos que estamos generando una nueva situación centro-periferia con China, a la que exportamos materias primas y alimentos y compramos rubros manufacturados con alto contenido tecnológico. Por su relevancia regional, se requerirán futuras negociaciones en el comercio con China. En el plano comercial las exportaciones pueden debilitarse por una menor demanda externa de Estados Unidos y Europa, como consecuencia de la crisis económica imperante. El dinamismo económico de nuestra región dependerá de las acciones de política económica que se implementen. Lo relevante sería que los países de América del Sur aprovecharan esta situación positiva para avanzar hacia modelos económicos con una dinámica inserción internacional, basada no solamente en commodities, sino en rubros con mayor valor agregado y contenido tecnológico, lo que significa tener una mirada de mediano plazo. 

Hay que avanzar hacia una nueva estructura productiva donde se mantengan los equilibrios macroeconómicos pero sin afectar la competitividad, o sea, sin apreciación de la moneda nacional, como está ocurriendo en la mayoría de los países de la región. Esto requiere alternativas en las políticas de corto plazo para conjugar simultáneamente estabilización, crecimiento y, por lo tanto, competitividad y empleo. También es indispensable que los equilibrios macroeconómicos no solamente tengan en cuenta variables financieras, sino también reales, como el crecimiento del PBI y el empleo.

Asi como vienen se va:El Banco Central anunciará en septiembre mecanismo de subasta de dólares

El Banco Central anunciará en septiembre un mecanismo de subasta de dólares, según se desprende de la Carta de Intención que envió el Gobierno al FMI, difundida este jueves.

La "Carta de intención, el Memorándum de Políticas Económicas y Financieras y el Memorándum de Entendimiento Técnico entre Argentina y el FMI", de 33 carillas, que fue enviada a la directora del Fondo, Christine Lagarde, sostiene que "el BCRA publicará a fines de septiembre de 2018 una regulación que introduzca un mecanismo de subasta de divisas para intervenir en los mercados de contado y de futuros", a lo que define como "una meta estructural para el programa".

Asimismo, agrega que a pedido del ministerio de Hacienda, "anunciará un programa para vender en el mercado parte de la asistencia presupuestaria del FMI para fondear las obligaciones del Tesoro denominadas en pesos".

El programa consistirá en "ventas dirarios previamente anunciadas, que se ejecutarán mediante una subasta de moneda extranjera".

La extensa nota -firmada por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, reclama al FMI el "apoyo al plan económico" del Gobierno.

"El plan ha sido diseñado por el Gobierno argentino y consideramos que es el adecuado teniendo en cuenta nuestra situación política, económica y social actual", subrayó el Poder Ejecutivo.

Y destacó que "como parte de este apoyo, estamos solicitando formalmente un Acuerdo Stand-By del FMI por un período de 36 meses, por un monto de DEG 35.379 millones (equivalente a aproximadamente USD 50.000 millones, o el 1.110 por ciento de la cuota de Argentina con el FMI)"
Fuente:Ambito

Se conocio la carta al FMI:El acuerdo con el FMI pide un ajuste más fuerte de lo esperado

Recortes en subsidios, amenazas al fondo de los jubilados, nueva carta orgánica del Banco Central y déficit cero. Compromete a ajustes en las provincias, aunque sin haberlas consultado.
(Foto: AFP)
14 de Junio de 2018
El gobierno nacional aprovechó el empuje que la media sanción de la Ley de legalización del aborto generó en los medios para dar a conocer el Memorándum de Políticas Económicas y Financieras (MPEF), que es la forma burocrática con que denomina al acuerdo que propone al Fondo Monetario Internacional.  No es muy diferente a lo que ya se había deslizado en los medios ni bien se anunció que Cambiemos había recurrido al FMI para capear el temporal de abril en los mercados de cambios. Pero tiene algunos agregados que demuestran mayor dureza de la que, si cabe, habían estimado los críticos del la vuelta al organismo de crédito.
Por lo pronto la carta de intención firmada por el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, se compromete a eliminar casi totalmente los subsidios a los servicios públicos, reducir el déficit a cero y a una inflación del 5% para dentro de dos años. Y queda claro que los sectores por donde correrá la tijera del ajuste estarán los planes sociales, los trabajadores estatales y los jubilados, actuales y futuros, aunque en el texto señala que se propone "proteger a los sectores más vulnerables de la carga de esta necesaria recalibración de la política económica".
Así, a los ya adelantados anuncios de reducción de déficit primario, se compromete -esto sin consultar con los gobernadores, muchos de los cuales ya se mostraron contrarios- aque el "ritmo de convergencia hacia un presupuesto balanceado del gobierno nacional irá acompañado por el esfuerzo de las provincias, cuyo balance consolidado primario consolidado se espera que pase de -0,4% en 2017 a un 0,25% del PBI hacia el final de acuerdo". O sea, 2021.
Al mismo tiempo, el documento plantea el compromiso de enviar al Congreso una modificación a la Carta Orgánica del Banco Central  para darle mayor autonomía. En línea con las grandes tradiciones del FMI y el neoliberalismo, el nuevo BCRA tendrá como mandato principal reforzar la estabilidad de precios, plantear metas de inflación con una anticipación de tres años,  e incluso establecerá las condiciones para la rendición de cuentas con potestad para suspender de moto propia la financiación directa o indirecta al Tesoro Nacional.
En cuanto a los empleos públicos, el texto indica que se irán reduciendo los planteles a través de la no renovación cargos y el congelamiento de nuevas contrataciones en el gobierno nacional durante dos años."Nuestro objetivo es que el gasto en personal caiga de 3,2 por ciento del PBI en 2017 a 2,7 por ciento hacia el final del programa".
Acerca de los jubilados y pensionados, además de avanzar hacia una reforma de la ley, que no se especifica, dice que se propone "amortizar activos de los fondos de pensión que se encuentran actualmente en posesión del gobierno como un medio para ayudar a financiar el pago de pensiones, incluyendo aquellas en la Ley de Reparación Histórica".  Luego asegura que entre los planes figura que si la recaudación crece menos de lo esperado por alguna debacle económica, no dudarán en recurrir a " una suma equivalente a 0,2 por ciento del PBI de medidas adicionales (especialmente en infraestructura) que podrían ser tomadas para cumplir con nuestras metas fiscales".
Al mismo tiempo le da al FMI la potestad de revisar el cómputo del Fondo de Garantía de Sustentabilidad y afirma que el monto total  existente luego de la nacionalización de los fondos de pensiones en 2008  "se distribuirá a lo largo del tiempo como ingresos para compensar parcialmente el gasto futuro en pensiones " y aclara que "el monto se dividirá por la expectativa de vida promedio de los contribuyentes a esos esquemas en 2018, es decir, 20 años", lo que augura que luego de ese término el FGS se habrá esfumado.
Ofrece a continuación algunas iniciativas sobre la disparidad de género. Y en un apartado especial puntualiza que "lograr que las mujeres argentinas puedan desarrollar todo su potencial no solo es una cuestión moral sino que también tiene sentido desde el punto de vista económico". Y agrega que "las mujeres en Argentina ganan en promedio menos que los hombres en puestos similares, son más propensas a trabajar en la economía informal, son menos propensas a participar en el mercado laboral, y sufren de peores condiciones de trabajo" .Luego detalla la forma en que pretenden reformar al sistema tributario para incentivar la participación femenina en el "mercado laboral" y para "acciones para promover igual paga y un sistema más equitativo de licencias de paternidad y maternidad".
En el capítulo "protegiendo a los más vulnerables", se habla de destinar más recursos a las Asignaciones Universales para Protección Social"en caso de que las condiciones sociales empeoren", para lo cual se permitiría un gasto adicional de hasta 13.500 millones de pesos en 2018 y el equivalente a 0,2 por ciento del PIB por año "en estos programas altamente focalizados y bien administrados".
Se si tiene en cuenta que los subsidios a la energía y el transporte disminuirán aún más hasta que  la proporción del costo de producción de esos servicios cubierto por el precio pagado por los consumidores pase "desde el 80 por ciento en 2017 hasta 90 por ciento en 2020, en promedio, para el gas, y desde 60 por ciento en 2017 hasta 90 por ciento en 2020, en promedio, para la electricidad", es más que seguro que por mas que persista alguna forma de tarifa social, los más vulnerables estarán en peores condiciones.
Fuente:Tiempo  Argentino